Asma infantil

El asma es una enfermedad respiratoria crónica que afecta a los bronquios, las vías respiratorias que llevan aire a los pulmones. En el asma, estas vías respiratorias se inflaman y se estrechan, lo que hace que sea difícil respirar. 

Es importante que los padres sepan que el asma no es curable, pero se puede controlar. Con el tratamiento adecuado, la mayoría de los niños con asma pueden llevar una vida activa y saludable.

  • Los síntomas del asma pueden variar de un niño a otro. Algunos niños pueden experimentar síntomas leves y otros pueden tener síntomas más graves. Los síntomas más comunes son:

    • Tos persistente, especialmente por la noche o temprano en la mañana.

    • Dificultad para respirar o respiración entrecortada.

    • Sensación de opresión en el pecho.

    • Silbido al respirar.

    Es importante que los padres estén atentos a estos síntomas y consulten a un médico si su hijo los experimenta con frecuencia, recuerda que en doc-doc contamos con profesionales para acompañarte a ti y a tu familia en su proceso de salud.

  • El asma puede afectar la calidad de vida de un niño, lo que puede llevar a problemas emocionales y sociales. Los niños con asma también tienen un mayor riesgo de desarrollar infecciones respiratorias y neumonía. En doc-doc no solo encuentras médicos pediatras y especialistas, también puedes encontrar psicólogos para realizar un tratamiento integral.

  • Respecto a la prevención, aún no se conoce cómo prevenir la artritis reumatoide. Sin embargo, hay factores de riesgo como el género (las mujeres tienen más probabilidades de desarrollar la enfermedad), la edad (puede ocurrir a cualquier edad, pero generalmente comienza entre los 40 y los 60 años) y la genética.

  • El tratamiento del asma infantil incluye el uso de medicamentos y medidas de prevención. Los medicamentos pueden incluir:

    • Inhaladores de rescate: se usan para aliviar los síntomas inmediatamente.

    • Inhaladores de control: se usan todos los días para prevenir los síntomas.

    • Medicamentos antiinflamatorios: se usan para reducir la inflamación de las vías respiratorias.

    Además de los medicamentos, es importante tomar medidas de prevención para reducir los desencadenantes del asma, como evitar el humo del tabaco y la exposición a alérgenos como el polen y los ácaros del polvo.

    Se debe realizar el tratamiento como lo indique el profesional de la salud. Ninguno de los medicamentos genera dependencia. Es importante enseñar al niño a inhalar y hacer uso correcto de sus medicamentos.

  • El asma es una enfermedad frecuente, más que todo en la infancia, al crecer muchos pacientes mejoran y no vuelven a presentar crisis asmáticas.

    Es importante que si tu o un familiar presenta los síntomas relatados anteriormente de forma frecuente se realice una consulta con un profesional de la salud que pueda apoyar el diagnóstico y tratamiento según sea el caso.